jueves, 10 de junio de 2010

CONTAMINACION DE SUELO

El suelo es el material suelto no consolidado que resulta inicialmente de la alteración meteorológica o de la disgregación física de las rocas y que, bajo la influencia de los seres vivos, evoluciona hasta formar un sistema complejo. de estructura estratificada y composición específica.
formación natural superficial, mineral, vegetal y animal, de estructura muelle y variable en extremo y espesores diferentes, resultante de la transformación de la roca madre por acción de los agentes biológicos y físicos.
Mezcla de minerales, materia orgánica, aire y agua en proporciones variables. El suelo forma la capa superior de la litosfera y habitan en él una infinidad de organismos.
Sustrato sobre el que se desarrollan la mayoría de organismos que viven sobre o dentro de la litosfera. Mezcla de minerales (arcilla, limo, arena, guijarros), materia orgánica en descomposición, organismo vivos, agua y aire.

La contaminación del suelo es la presencia de compuestos químicos hechos por el hombre u otra alteración al ambiente natural del suelo.
Esta contaminación generalmente aparece al producirse una ruptura de tanques de almacenamiento subterráneo, aplicación de pesticidas, filtraciones de rellenos sanitarios o de acumulación directa de productos industriales.
Los químicos más comunes incluyen derivados del petróleo, solventes, pesticidas y otros metales pesados. Éste fenómeno está estrechamente relacionado con el grado de industrialización e intensidad del uso de químicos.
En lo concerniente a la contaminación de suelos su riesgo es primariamente de salud, de forma directa y al entrar en contacto con fuentes de agua potable. La delimitación de las zonas contaminadas y la resultante limpieza de esta son tareas que consumen mucho tiempo y dinero, requiriendo extensas habilidades de geología, hidrografía, química y modelos a computadora.

CONTAMINACION VISUAL

La contaminación visual es un tipo de contaminación que parte de todo aquello que afecte o perturbe la visualización de sitio alguno o rompan la estética de una zona o paisaje, y que puede incluso llegar a afectar a la salud de los individuos o zona donde se produzca el impacto ambiental.
Se refiere al abuso de ciertos elementos “no arquitectónicos” que alteran la estética, la imagen del paisaje tanto rural como urbano, y que generan, a menudo, una sobreestimulación visual agresiva, invasiva y simultánea.
Dichos elementos pueden ser carteles, cables, chimeneas, antenas, postes y otros elementos, que no provocan contaminación de por sí; pero mediante la manipulación indiscriminada del hombre (tamaño, orden, distribución) se convierten en agentes contaminantes.
Una salvaje sociedad de consumo en cambio permanente que actúa sin conciencia social, ni ambiental es la que avala (o permite) la aparición y sobresaturación de estos contaminantes. Esto se evidencia tanto en poblaciones rurales como en aglomeraciones urbanas de mayor densidad. Pero lógicamente es en las metrópolis, donde todos estos males se manifiestan más crudamente.
Todos estos elementos descriptos influyen negativamente sobre el hombre y el ambiente disminuyendo la calidad de vida.
La cartelería publicitaria es el agente más notorio por su impacto inmediato, creando una sobreestimulación en el ser humano mediante la información indiscriminada, y los múltiples mensajes que invaden la mirada. Así el hombre percibe un ambiente caótico y de confusión que lo excita y estimula, provocándole una ansiedad momentánea mientras dura el estímulo.
La simultaneidad de estos estímulos a la que se ven sometidos, por ejemplo, los automovilistas, pueden llegar a transformarse en disparadores de accidentes de tránsito. Dado que pueden llegar a generar distracción, e incluso a imposibilitar la percepción de las señales indicadoras de tránsito. Esta situación, inevitablemente, actúa también en detrimento de los mismos medios de comunicación, mimetizando los diferentes signos y señales a que se somete a los individuos, camuflándose mutuamente y perdiendo fuerza la clara lectura del mensaje.
Pero estos agentes también afectan notoriamente al espacio físico.
Se ven así fachadas destruidas u ocultas por la superposición de carteles, estructuras metálicas y chimeneas. La arquitectura aparece desvalorizada y miniaturizada. El cielo oculto por cables y antenas. El espacio público desvirtuado e invadido por postes, sostenes de carteles, refugios; el tránsito peatonal entorpecido; y la vegetación destruida. Este panorama es terriblemente agresivo para el hombre común, imaginemos cuánto lo es para un discapacitado, niño o anciano.
Esta situación no sólo atenta contrala belleza del espacio urbano, sino también sobre la lectura poco clara que tienen los individuos del mismo, dificultando la identificación del habitante con su ciudad.
Una ciudad con contaminación visual denota un estado con falta de política para la ciudad, con una regulación deficitaria o inexistente del espacio público y privado. Así las ciudades se convierten en escenarios de millones de decisiones individuales despreocupadas por su entorno, que conviven formando un caos difícil de asimilar por el ojo humano.
La contaminación visual es todo aquello que afecta o perturba la visualización de una determinada zona o rompe la estética del paisaje. El cerebro humano tiene una determinada capacidad de absorción de datos que se ve rebasada por la cantidad de elementos en el paisaje.
Las causas de este tipo de contaminación son: vallas publicitarias, tráfico aéreo, cableados, antenas de televisión, parabólicas, pararrayos, basuras o vertederos, grafitis, edificios deteriorados, redes de distribución eléctrica, exceso de señales de tráfico e incluso molinos eólicos.
Sus consecuencias son diversas: accidentes ocasionados por obstrucción visual al conducir, trastornos de atención, estética paisajística afectada, alteraciones del sistema nervioso, estrés por saturación de elementos y colores, dolor de cabeza, mal humor y disminución de la eficiencia laboral.
Algunas soluciones para combatirlas son entre otras, reducir la cantidad de anuncios y hacer un seguimiento de normas urbanísticas racionales, evitando elementos agresivos o recargados.

CONTAMINACION AUDITIVA

Pareciera que la palabra contaminación estuviera referida a ciertos elementos como la tierra o el agua, pues casi todos olvidan (u olvidamos) que también existe la contaminación auditiva que perjudica la salud de cientos de personas; esta es casi prácticamente ignorada en todo los países del mundo lo que la convierte en un problema silencioso pero muy perjudicial.
Así, los sonidos muy fuertes provocan diversas molestias en los seres humanos, de hecho estas pueden ir desde un desagrado hasta daños que pueden ser irreversibles. Así, la presión de la audición se mide a través de decibelios (dB) y los que son especialmente molestos son los tonos altos (dB-A). De esta manera, la presión acústica se vuelve dañina a unos 75 dB-A y dolorosa cuando se presentan alrededor de los 120 dB-A. En realidad, cuando lelga a los 180 dB-A, puede causar la muerte.
Por ejemplo un oído que ha estado expuesto a 2 horas de 100 dB (es decir una discoteca ruidosa) necesita unas 16 horas de reposo para compensar esas dos horas. Así, si la persona va a un concierto de música donde toca alguna banda muy ruidosa y llega a una exposición de más de 120 dB se puede llegar a causar daño en las células sensibles al sonido del oído interno provocando pérdidas de audición.
Debido a esta condición, la Organización Mundial de la Salud OMS ha establecido cierto nivel de tolerancia de decibelios, es decir 65 el cual es lo máximo que puede o debe escuchar un oído humano; sin embargo, en ciudades como la capital de México este nivel promedio sobrepasa dicho número llegando a 80.
Pero ¿Qué enfermedades están asociadas a este alto número de decibeles que contaminan nuestro ambiente y por tanto, causan diferentes deficiencias en la población? Pues, la otorrinolaringóloga María del Pilar Canseco, se apresuró en decir cuando se da una contaminación auditiva por encima de los 80 dB esta puede ocasionar un deterioro de las células auditivas con lo que el daño puede ser irreversible si la persona no se da a cuenta a tiempo; en cambio, si esta persona no frecuenta mucho este tipo de ruidos lo más probable es que no tenga este problema o que lo tenga por un tiempo nada más.
Son muchos los agentes que contaminan, de hecho están los ruidos que emiten los autos (el claxon, el motor, el tráfico), los gritos, la música a alto volumen, entre otros, todos ellos causan el nerviosismo de las personas, y enfermedades como estrés, insomnio y mal humor. Estas son las consecuencias de una contaminación auditiva silente que también puede ocasionar la perdida total de este sentido, claro que esto ocurre de una manera paulatina pero también podría darse de una manera agresiva, presentando el enfermo un traumatismo acústico en un solo instante.
Esto último puede darse debido a una exposición a un ruido que sea muy intenso, entre estos podemos encontrar los cuetes que se revientan durante los días festivos (navidad, año nuevo, etc.), escuchar un balazo, escuchar música en una discoteca, entre otros.
En realidad, de una u otra manera, todas las personas estamos expuestas a este daño sin embargo, es mucho más fácil darse cuenta que quienes viven en zonas de una alta intensidad de ruidos, es decir zonas aledañas a aeropuertos o avenidas que sean muy transitadas serán las más vulnerables y las que siempre deben acudir a hacerse revisar sus oídos, estas revisiones son llamadas “audiometrías”.
Qué son las audiometríasPues una audiometría, es una prueba realizada por un especialista que permite saber cuál es el nivel de intensidad de decibeles que tenemos y también las frecuencias, es decir cuáles son las que se deterioran más rápido, las frecuencias graves o las agudas. De hecho, algunas veces el ruido no solo produce una baja audición sino también zumbidos o acúfenos constantes, también se dan vértigos o mareos debido a una exposición al ruido.
De otro lado, encontramos que la Organización Mundial de la Salud OMS tiene estadísticas acerca de la contaminación auditiva alrededor del mundo. Esta entidad asegura que son 130 millones de personas las que están constantemente expuestas a niveles de ruido mayores a los 65 dB , y además, existen 300 millones de seres humanos que viven en zonas de incomodidad acústica.
De hecho, Japón es el país más ruidoso del mundo al que le sigue España, el cual debido a su falta de planificación por su crecimiento urbano presenta fuertes niveles de contaminación auditiva; finalmente México quien se encuentra en un tercer lugar. Sin embargo, España es el país más ruidoso del continente europeo, además existen estudios en 23 ciudades españolas en donde se han obtenido algunos resultados dentro del mapa de ruidos los cuales señalan que el nivel de ruido equivalente, durante el día, se encuentra entre los 62 a los 73 dB.
Así, cabe resaltar que la contaminación ambiental proviene sobre todo de los vehículos que tienen un 80% de actividad, el 10% de las industrias y lo que resta de los bares locales, talleres y ferrocarriles.
Cómo reducir la contaminación auditivaSi reducimos el ruido, reducimos la contaminación. Esto puede hacerse al reducir las sirenas de los autos, controlando el ruido de las motocicletas, coches y cualquier tipo de maquinarias. De otro lado, también se pueden instalar pantallas o sistemas de protección entre la fuente de ruido y los oyentes ya que así se pueden llegar a paliar este tipo de contaminación.

miércoles, 9 de junio de 2010

parque hundido

CONTAMINACION EN PARQUES
La convivencia del hombre con los animalesde compañía predispone a la ocurrenciade una serie de enfermedades zoonóticas(Soulsby, 1987). Dentro de éstas, se encuentranlas zoonosis parasitarias como laToxocara canis y la Toxocara cati, parásitoscosmopolitas que pueden causar problemasde toxocariasis en el humano, especialmenteen infantes (Acha y Szyfres, 1989).El ciclo vital del Toxocara canis escomplejo, existiendo cuatro formas de transmisiónen los perros: prenatal, calostral, directay por hospederos paraténicos. A diferenciadel T. canis, la contaminación con T.cati no implica infección prenatal pero silactogénica y por hospederos paraténicosimportantes. Las formas de LMV (larvamigrante visceral) y LMO (larva migranteocular) se presentan en el humano y se debenprincipalmente a la ingestión de huevoslarvados con el segundo estadio de Toxocarasp. (Atías, 1994; Leguía, 1996) que se encuentrandiseminados en la tierra y céspedde los parques públicos (Georgi y Georgi,1994).Se dispone de información sobre gradosde contaminación de Toxocara sp. enparques públicos de ciudades importantes.Así, se reporta que el 25% de parques seencontraba contaminado en la ciudad deBirminngham y el 27% en Londres (Borg yWoodruff, 1973), el 16% en Illinois (Paul etal., 1988), el 17% en Basrah (Mahdi y Ali,1993), el 15% en Jordania (Abo-Shehada yHerber, 1984), el 63% en Tokushima(Shimizu, 1993) y el 42% en La Habana(Dumenigo y Gálvez, 1995). En el Perú, losprimeros estudios realizados por Guerrero(1975) en parques públicos de Lima Metropolitanadieron un resultado de 24%. Estudiosposteriores señalaron niveles de contaminacióndel 37% de los parques de la ProvinciaConstitucional del Callao (Velarde,1999), 30% de los parques públicos de losdistritos del Cono Sur, 41% de los parquesdel Cono Este de Lima (Serrano et al., 2000)y 30% de los parques del Cono Norte (LaRosa et al., 2001).La alta prevalencia de Toxocara sp. enperros y gatos, el gran número de huevos queéstos eliminan y su gran resistencia al medioambiente, principalmente en suelos húmedos,favorecen su supervivencia y contribuyen ala contaminación del suelo, el cual constituiríala principal fuente de infección para elhombre (Acha y Szyfres, 1989). En el Perú,Morales, en 1983 (citado por Reyes et al.,1999), determinó que el 70 % de perros de lazona de Lima Metropolitana estaban infectadospor Toxocara sp.El presente estudio tuvo por objetivohacer la evaluación del grado de infección delos parques públicos de Lima Oeste comoparte final del proyecto de evaluación parasitariade las grandes áreas de Lima Metropolitanallevada a cabo por el Laboratorio deParasitología de la Facultad de Medicina Ve terinariade la Universidad Nacional Mayor deSan Marcos.El presente trabajo evaluó la contaminaciónde los parques públicos de la zona Oestede Lima Metropolitana (Breña, Jesús María,La Victoria, Lima, Lince, Magdalena del Mar,Miraflores, Pueblo Libre, San Borja, San Isidro,San Luis, San Miguel y Surquillo).La recolección de muestras se realizóen el periodo de abril-agosto de 1999, dondese registró una temperatura mínima de 16 °C,una temperatura máxima de 20.4 °C y unahumedad relativa media de 87 a 94 %(SENAMHI, 2002). El método de recolecciónde muestras y el análisis de las mismas sehizo siguiendo el protocolo de trabajos previos(Velarde, 1999; Serrano et al., 2000; Cajas,1999; La Rosa et al., 2001).El tamaño muestral (123 parques) sedeterminó usando la fórmula para proporcionesen poblaciones finitas (Daniel, 1996). Estenúmero se estratificó teniendo en cuenta elnúmero de parques por cada distrito, realizándoseun muestreo al azar simple.Para determinar la viabilidad de los huevosobtenidos de los parques positivos, estosse incubaron en una solución de bicromato depotasio al 2.5 % por 30 días, con el fin deobtener huevos larvados. Posteriormente,1,500 de estos huevos fueron inoculados víaoral en cuatro codornices, mientras que otrascuatro se mantuvieron como grupo control.Las codornices se sacrificaron a las 24 horas,5, 7 y 10 días post infección, con el fin dehallar posibles lesiones hepáticas, pulmonares,etc. La presencia de larvas en las vísceras delas codornices se determinó por el método deBaermann.RESULTADOS Y DISCUSIÓNLos resultados mostraron que el 63 ± 9%de los parques públicos de la zona de LimaOeste se encontraban contaminados con huevosde Toxocara sp. El distrito más contaminadofue Breña, donde los cuatro parquesmuestreados resultaron positivos, en tantoque el distrito menos contaminado fueSurquillo con el 25% de sus parques contaminados(Cuadro 1).En trabajos previos llevados a cabo enLima Metropolitana utilizando un protocolode trabajo similar, se encontraron prevalenciasde 29% de parques públicos contaminadosen el cono Sur de Lima (Cajas,1999), 41% en el Cono Este (Serrano et al.,2000), 34% en el Cono Norte (La Rosa etal., 2001) y 37% en los parques de la ProvinciaConstitucional del Callao (Velarde,1999). En el presente trabajo, el 63% de contaminaciónfue el más alto debido posiblementea que en el Cono Oeste de Lima seencuentran muchos parques ubicados enzonas de estratos socioeconomicos más altos,en comparación con otras áreas de Lima.Esto se puede traducir en una mejor conservaciónde sus parques, con tierras húmedas,umbrosas, coloidales y compactas, que hacenun habitat adecuado para la viabilidadde los huevos del Toxocara sp., en contrastecon parques más descuidados con terrenossecos, blandos y arenosos.En el Cuadro 2 se muestra el porcentajede parques contaminados, según su estadode conservación. Se nota que los parquesen mejor estado de conservación eranlos más contaminados (71% de prevalencia).La estructura y composición del suelo jueganun papel muy importante, sobre todo enaquellos parques bien conservados, cuyavegetación mantiene condiciones suficientesde humedad y microclimas favorables parael desarrollo de los huevos de Toxocara sp.Años atrás, Buitrón (1976) encontró una prevalenciaelevada de contaminación en áreascon gran número de jardines, áreas de cultivoo huertos, pero en aquellos sectores sinjardines o aquellos terrenos áridos no se obtuvoninguna muestra positiva. En México,Vásquez et al. (1996) demostraron que losjardines caseros estaban más contaminados(16.9%) que los parques públicos (10.9%).El aguaEl agua es un recurso escaso, pero de importancia vital para la sociedad y la naturaleza, ya que forma parte, en un tanto por ciento elevado, de la constitución de todos los seres vivos. De todo el agua existente en el planeta, sólo una pequeña parte es aprovechable por la sociedad, y por la mayor parte de la naturaleza.

El agua es un recurso que proporciona energía y vida. La peculiar forma de vida humana, en grandes ciudades escasas de agua, y las técnicas de producción son grandes consumidoras de agua, lo que exige la creación de grandes infraestructuras, como embalses y conducciones de distribución del agua, tanto aéreas como subterráneas. Incluso, se puede llegar al trasvase de agua entre cuencas hidrográficas.De todo lo disponible, el 80% del agua se utiliza en la agricultura de regadío, que se contamina poco, dependiendo de los abonos químicos que se hayan utilizado. El 14% del agua lo utiliza la industria, que es altamente contaminada. Y el 6% restante lo utiliza la ciudad, y también está muy contaminada una vez que se ha utilizado. Frecuentemente, parte del agua disponible se pierde a causa de las malas conducciones. Se puede perder hasta el 40% del total embalsado.El agua de las ciudades y de la industria, pero también en algunos casos de la agricultura, está contaminada por productos difícilmente degradables, como los aceites o los detergentes. Estos productos se vierten en los ríos, con lo que se disminuyen las proporciones de oxígeno. Algunos productos pueden actuar directamente de veneno para algunas especies que viven en el agua, o que la utilizan, es el caso de la contaminación por mercurio y otros metales pesados. Estos productos, a través del agua, se depositan en los suelos y entran a formar parte de la cadena trófica y la alimentación humana.Los agentes contaminantes alcanzan otros ámbitos a través de los ríos. Debido a las dimensiones de la contaminación han llegado a perjudicar, gravemente, mares enteros, comprometiendo el equilibrio ecológico de ellos, de su entorno y de todo el planeta.

El aire

La contaminación del aire resulta muy fácil. Su problema, real, comienza con la utilización masiva de combustibles fósiles en la industria y la automoción. Las ciudades son lugares en las que las concentraciones de partículas contaminantes son especialmente elevadas, junto con los grandes centros industriales. El régimen de vientos expande las partículas por todo el globo, pero es en los países industrializados donde mayor incidencia tiene la contaminación del aire. Estas partículas (CO2, SO2) se precipitan, mezcladas con el agua de lluvia, formando ácido clorhídrico y sulfúrico, y dando lugar a la lluvia ácida, de efectos tan perniciosos para las biocenosis, al proporcionar un agua no apta para ser consumida por los seres vivos.Las consecuencias de la contaminación aérea en el clima global están por determinar, puesto que si, por un lado, parece que hace disminuir el brillo del sol, por otro, parece que hace aumentar el efecto invernadero. Las series de estudios al respecto son aún demasiado cortas para llegar a conclusiones definitivas, aunque parece que apuntan en el sentido del calentamiento global del clima. O al menos, si no son su causa si parece que puedan acelerar el proceso.

El suelo

El uso del suelo es otra de las características de la intervención humana en el medio, desde la reserva de espacios para su uso exclusivo, como en las ciudades, la industria, las comunicaciones o la agricultura, hasta su degradación general a través de la contaminación coloidal, por la lluvia ácida o la utilización en la agricultura de abonos químicos nitrogenados. En la agricultura, el cultivo de una sola especie le hace perder los nutrientes necesarios para su crecimiento, y dificultan también el desarrollo de otras especies, con lo que se disminuye la variedad de las plantas.Además, la deforestación y los incendios favorecen la pérdida del suelo, sobre todo si es heredado de condiciones ecológicas antiguas, de una manera irrecuperable. La erosión del suelo, a la que se ve sometido por la desaparición de la cubierta vegetal, es generalizada en todo el mundo, pero sobre todo en las regiones de tránsito ecológico.La sociedad, en suma, incide sobre el paisaje transformándolo y modificando su funcionamiento, para obtener de él los recursos necesarios que permiten el desarrollo económico, pero sin que el medio se vea expoliado hasta su desaparición. La manera y la velocidad con la que se extraen esos recursos es lo que provoca los desequilibrios.

martes, 8 de junio de 2010

CONTAMINACION EN PARQUES

La convivencia del hombre con los animales
de compañía predispone a la ocurrencia
de una serie de enfermedades zoonóticas
(Soulsby, 1987). Dentro de éstas, se encuentran
las zoonosis parasitarias como la
Toxocara canis y la Toxocara cati, parásitos
cosmopolitas que pueden causar problemas
de toxocariasis en el humano, especialmente
en infantes (Acha y Szyfres, 1989).
El ciclo vital del Toxocara canis es
complejo, existiendo cuatro formas de transmisión
en los perros: prenatal, calostral, directa
y por hospederos paraténicos. A diferencia
del T. canis, la contaminación con T.
cati no implica infección prenatal pero si
lactogénica y por hospederos paraténicos
importantes. Las formas de LMV (larva
migrante visceral) y LMO (larva migrante
ocular) se presentan en el humano y se deben
principalmente a la ingestión de huevos
larvados con el segundo estadio de Toxocara
sp. (Atías, 1994; Leguía, 1996) que se encuentran
diseminados en la tierra y césped
de los parques públicos (Georgi y Georgi,
1994).
Se dispone de información sobre grados
de contaminación de Toxocara sp. en
parques públicos de ciudades importantes.
Así, se reporta que el 25% de parques se
encontraba contaminado en la ciudad de
Birminngham y el 27% en Londres (Borg y
Woodruff, 1973), el 16% en Illinois (Paul et
al., 1988), el 17% en Basrah (Mahdi y Ali,
1993), el 15% en Jordania (Abo-Shehada y
Herber, 1984), el 63% en Tokushima
(Shimizu, 1993) y el 42% en La Habana
(Dumenigo y Gálvez, 1995). En el Perú, los
primeros estudios realizados por Guerrero
(1975) en parques públicos de Lima Metropolitana
dieron un resultado de 24%. Estudios
posteriores señalaron niveles de contaminación
del 37% de los parques de la Provincia
Constitucional del Callao (Velarde,
1999), 30% de los parques públicos de los
distritos del Cono Sur, 41% de los parques
del Cono Este de Lima (Serrano et al., 2000)
y 30% de los parques del Cono Norte (La
Rosa et al., 2001).
La alta prevalencia de Toxocara sp. en
perros y gatos, el gran número de huevos que
éstos eliminan y su gran resistencia al medio
ambiente, principalmente en suelos húmedos,
favorecen su supervivencia y contribuyen a
la contaminación del suelo, el cual constituiría
la principal fuente de infección para el
hombre (Acha y Szyfres, 1989). En el Perú,
Morales, en 1983 (citado por Reyes et al.,
1999), determinó que el 70 % de perros de la
zona de Lima Metropolitana estaban infectados
por Toxocara sp.
El presente estudio tuvo por objetivo
hacer la evaluación del grado de infección de
los parques públicos de Lima Oeste como
parte final del proyecto de evaluación parasitaria
de las grandes áreas de Lima Metropolitana
llevada a cabo por el Laboratorio de
Parasitología de la Facultad de Medicina Ve terinaria
de la Universidad Nacional Mayor de
San Marcos.
El presente trabajo evaluó la contaminación
de los parques públicos de la zona Oeste
de Lima Metropolitana (Breña, Jesús María,
La Victoria, Lima, Lince, Magdalena del Mar,
Miraflores, Pueblo Libre, San Borja, San Isidro,
San Luis, San Miguel y Surquillo).
La recolección de muestras se realizó
en el periodo de abril-agosto de 1999, donde
se registró una temperatura mínima de 16 °C,
una temperatura máxima de 20.4 °C y una
humedad relativa media de 87 a 94 %
(SENAMHI, 2002). El método de recolección
de muestras y el análisis de las mismas se
hizo siguiendo el protocolo de trabajos previos
(Velarde, 1999; Serrano et al., 2000; Cajas,
1999; La Rosa et al., 2001).
El tamaño muestral (123 parques) se
determinó usando la fórmula para proporciones
en poblaciones finitas (Daniel, 1996). Este
número se estratificó teniendo en cuenta el
número de parques por cada distrito, realizándose
un muestreo al azar simple.
Para determinar la viabilidad de los huevos
obtenidos de los parques positivos, estos
se incubaron en una solución de bicromato de
potasio al 2.5 % por 30 días, con el fin de
obtener huevos larvados. Posteriormente,
1,500 de estos huevos fueron inoculados vía
oral en cuatro codornices, mientras que otras
cuatro se mantuvieron como grupo control.
Las codornices se sacrificaron a las 24 horas,
5, 7 y 10 días post infección, con el fin de
hallar posibles lesiones hepáticas, pulmonares,
etc. La presencia de larvas en las vísceras de
las codornices se determinó por el método de
Baermann.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Los resultados mostraron que el 63 ± 9%
de los parques públicos de la zona de Lima
Oeste se encontraban contaminados con huevos
de Toxocara sp. El distrito más contaminado
fue Breña, donde los cuatro parques
muestreados resultaron positivos, en tanto
que el distrito menos contaminado fue
Surquillo con el 25% de sus parques contaminados
(Cuadro 1).
En trabajos previos llevados a cabo en
Lima Metropolitana utilizando un protocolo
de trabajo similar, se encontraron prevalencias
de 29% de parques públicos contaminados
en el cono Sur de Lima (Cajas,
1999), 41% en el Cono Este (Serrano et al.,
2000), 34% en el Cono Norte (La Rosa et
al., 2001) y 37% en los parques de la Provincia
Constitucional del Callao (Velarde,
1999). En el presente trabajo, el 63% de contaminación
fue el más alto debido posiblemente
a que en el Cono Oeste de Lima se
encuentran muchos parques ubicados en
zonas de estratos socioeconomicos más altos,
en comparación con otras áreas de Lima.
Esto se puede traducir en una mejor conservación
de sus parques, con tierras húmedas,
umbrosas, coloidales y compactas, que hacen
un habitat adecuado para la viabilidad
de los huevos del Toxocara sp., en contraste
con parques más descuidados con terrenos
secos, blandos y arenosos.
En el Cuadro 2 se muestra el porcentaje
de parques contaminados, según su estado
de conservación. Se nota que los parques
en mejor estado de conservación eran
los más contaminados (71% de prevalencia).
La estructura y composición del suelo juegan
un papel muy importante, sobre todo en
aquellos parques bien conservados, cuya
vegetación mantiene condiciones suficientes
de humedad y microclimas favorables para
el desarrollo de los huevos de Toxocara sp.
Años atrás, Buitrón (1976) encontró una prevalencia
elevada de contaminación en áreas
con gran número de jardines, áreas de cultivo
o huertos, pero en aquellos sectores sin
jardines o aquellos terrenos áridos no se obtuvo
ninguna muestra positiva. En México,
Vásquez et al. (1996) demostraron que los
jardines caseros estaban más contaminados
(16.9%) que los parques públicos (10.9%).

El agua

El agua es un recurso escaso, pero de importancia vital para la sociedad y la naturaleza, ya que forma parte, en un tanto por ciento elevado, de la constitución de todos los seres vivos. De todo el agua existente en el planeta, sólo una pequeña parte es aprovechable por la sociedad, y por la mayor parte de la naturaleza.
El agua es un recurso que proporciona energía y vida. La peculiar forma de vida humana, en grandes ciudades escasas de agua, y las técnicas de producción son grandes consumidoras de agua, lo que exige la creación de grandes infraestructuras, como embalses y conducciones de distribución del agua, tanto aéreas como subterráneas. Incluso, se puede llegar al trasvase de agua entre cuencas hidrográficas.
De todo lo disponible, el 80% del agua se utiliza en la agricultura de regadío, que se contamina poco, dependiendo de los abonos químicos que se hayan utilizado. El 14% del agua lo utiliza la industria, que es altamente contaminada. Y el 6% restante lo utiliza la ciudad, y también está muy contaminada una vez que se ha utilizado. Frecuentemente, parte del agua disponible se pierde a causa de las malas conducciones. Se puede perder hasta el 40% del total embalsado.
El agua de las ciudades y de la industria, pero también en algunos casos de la agricultura, está contaminada por productos difícilmente degradables, como los aceites o los detergentes. Estos productos se vierten en los ríos, con lo que se disminuyen las proporciones de oxígeno. Algunos productos pueden actuar directamente de veneno para algunas especies que viven en el agua, o que la utilizan, es el caso de la contaminación por mercurio y otros metales pesados. Estos productos, a través del agua, se depositan en los suelos y entran a formar parte de la cadena trófica y la alimentación humana.
Los agentes contaminantes alcanzan otros ámbitos a través de los ríos. Debido a las dimensiones de la contaminación han llegado a perjudicar, gravemente, mares enteros, comprometiendo el equilibrio ecológico de ellos, de su entorno y de todo el planeta.

El aire

La contaminación del aire resulta muy fácil. Su problema, real, comienza con la utilización masiva de combustibles fósiles en la industria y la automoción. Las ciudades son lugares en las que las concentraciones de partículas contaminantes son especialmente elevadas, junto con los grandes centros industriales. El régimen de vientos expande las partículas por todo el globo, pero es en los países industrializados donde mayor incidencia tiene la contaminación del aire. Estas partículas (CO2, SO2) se precipitan, mezcladas con el agua de lluvia, formando ácido clorhídrico y sulfúrico, y dando lugar a la lluvia ácida, de efectos tan perniciosos para las biocenosis, al proporcionar un agua no apta para ser consumida por los seres vivos.
Las consecuencias de la contaminación aérea en el clima global están por determinar, puesto que si, por un lado, parece que hace disminuir el brillo del sol, por otro, parece que hace aumentar el efecto invernadero. Las series de estudios al respecto son aún demasiado cortas para llegar a conclusiones definitivas, aunque parece que apuntan en el sentido del calentamiento global del clima. O al menos, si no son su causa si parece que puedan acelerar el proceso.

El suelo

El uso del suelo es otra de las características de la intervención humana en el medio, desde la reserva de espacios para su uso exclusivo, como en las ciudades, la industria, las comunicaciones o la agricultura, hasta su degradación general a través de la contaminación coloidal, por la lluvia ácida o la utilización en la agricultura de abonos químicos nitrogenados. En la agricultura, el cultivo de una sola especie le hace perder los nutrientes necesarios para su crecimiento, y dificultan también el desarrollo de otras especies, con lo que se disminuye la variedad de las plantas.
Además, la deforestación y los incendios favorecen la pérdida del suelo, sobre todo si es heredado de condiciones ecológicas antiguas, de una manera irrecuperable. La erosión del suelo, a la que se ve sometido por la desaparición de la cubierta vegetal, es generalizada en todo el mundo, pero sobre todo en las regiones de tránsito ecológico.
La sociedad, en suma, incide sobre el paisaje transformándolo y modificando su funcionamiento, para obtener de él los recursos necesarios que permiten el desarrollo económico, pero sin que el medio se vea expoliado hasta su desaparición. La manera y la velocidad con la que se extraen esos recursos es lo que provoca los desequilibrios.

martes, 1 de junio de 2010

Ensayo

lsakdjflaksdjf